Segovia, monumentos y gastronomía

 Acueducto de Segovia

Una rica historia y unos hermosos monumentos hacen de esta ciudad un destino ideal para viajar. Segovia tiene innumerables atractivos que ofrecer a los turistas. Desde su famoso acueducto romano del siglo I a una gastronomía excelente, cualquiera que sea el lugar al que vayamos nos encantará.

Su acueducto es una maravilla de la arquitectura romana antigua. Domina el inicio del centro histórico de la ciudad, y a simple vista es impresionante, sobre todo por el hecho de que está perfectamente conservado a pesar de sus veinte siglos de historia. Fue construido para llevar agua a Segovia desde el río más cercano, a más de 18 kilómetros de distancia.

Muchas terrazas de restaurantes rodean la parte más alta del acueducto, y resulta muy común ver a muchos artistas pintando el propio acueducto en sus alrededores.

Otra de las grandes atracciones de la ciudad es el Alcázar, situado en la cima de una montaña, con una hermosa vista desde él de los campos castellano-leoneses. Sin embargo, el Castillo del Alcázar es mucho más impresionante. Con su altas torres y sus tejados azules, este castillo ha inspirado a muchos artistas, entre ellos y de manera especial Walt Disney.

Este castillo comenzó siendo una fortaleza árabe, sin embargo fue conquistado por las tropas cristianas de Alfonso VI en el siglo XI, transformándose en uno de los palacios favoritos de los reyes de España. Os recomendamos una visita guiada por el castillo, ya que además suelen ser muy baratas.

 Alcázar de Segovia

La Catedral gótica de Segovia domina la Plaza Mayor de la ciudad. Su diseño arquitectónico es sencillamente impresionante, y cautiva tanto a turistas como a historiadores por igual. Esta catedral fue construida en 1525 por Juan Gil de Hontañón, pero fueron sus hijos quienes concluyeron el proyecto tras su muerte.

Segovia es conocida también por su interesante y sabrosa cocina. Entre sus platos más destacados figuran el cochinillo asado, un manjar de carne muy tierna. El cerdo se sirve entero, y para demostrar la blandura de la carne, el camarero corta en trozos el cochinillo con un plato. Quizás para algunos de estómago sensible no sea la comida ideal, sin embargo os puedo asegurar que la carne es deliciosa. También tenemos que probar el cordero asado.

Los postres segovianos también son muy conocidos en España. Entre ellos os recomiendo la leche frita, el arroz con leche y el ponche segoviano, un típico pastel de mazapán.

Cómo llegar

A Segovia es fácil llegar en coche, además de en tren y en autobús. Renfe ofrece una línea que va desde la estación de tren de Chamartín en Madrid, con un trayecto que apenas dura 30 minutos. La estación de tren de Segovia se halla a unos cuatro kilómetros del centro de la ciudad, aunque desde allí se puede tomar el autobús.

Paralelamente hay un autobús desde Madrid, que sale de la Estación Príncipe Pío, que va a Segovia. El viaje dura aproximadamente hora y media, dependiendo del tráfico. La estación de autobuses de Segovia se encuentra a sólo cinco minutos a pie del acueducto romano, en el centro de la ciudad.

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