Visita el Zoológico de Fuengirola

La Costa del Sol malagueña no solo nos tiene reservado el clásico turismo de playa, hotel y piscina. Hay una serie de atractivos que no os deberíais perder. Entre ellos dejadme que hoy os recomiendo el Zoológico de Fuengirola, situado en el centro de la localidad, junto a la Plaza de Toros y el Parque del Sol.

Si tenéis reservados vuestros hoteles en Fuengirola posiblemente os coja muy cerca de allí. La historia de este zoológico hay que buscarla en la década de los 70, aunque no será hasta 1998, cuando la empresa Rain Forest toma el control del complejo, cuando se convertirá en uno de los mejores zoológicos de España. Su fascinante hábitat natural le permite albergar especies tan dispares como de Madagascar, el África ecuatorial y el sudeste asiático.

En este zoológico todo está perfectamente recreado, con valles, cuevas y cascadas que hacen que los animales se sientan como si estuvieran en casa. Veremos especies en peligro de extinción, destacando especialmente el trabajo que desde 1970 se ha llevado a cabo con los chimpancés. Son muchos los bebés chimpancés que, gracias a las condiciones del recinto, han podido nacer y criarse en el zoológico sin ningún problema.

De Oviedo a Ferrol, ruta turística por el norte de España

De Oviedo a Ferrol apenas hay 270 kilómetros. Un recorrido que se puede hacer perfectamente en coche, o bien a través de los trenes FEVE que ofrecen sus servicios en el norte peninsular. Hace unos días nosotros tuvimos la oportunidad de disfrutar de esta preciosa excursión. En un fin de semana decidimos escaparnos, y todo lo demás vino rodado…

No hace falta esperar a las vacaciones para decidir hacer un pequeño viaje como este. En Oviedo nos perdimos en el encanto de su centro histórico. Calles estrechas y empedradas, con la Catedral de San Salvador en pleno horizonte. Rodeada de montañas y valles hermosos, no dejar de visitar su Museo de Bellas Artes, que alberga obras de El Greco y Goya, además de pasar la noche en algunas de sus tabernas y sidrerías.

Tras nuestra estancia en Oviedo pusimos rumbo hacia el oeste, a orillas de la costa atlántica. Tras atravesar hermosos lugares como Avilés y, especialmente Cudillero, con sus casitas enfrentadas a la orilla del mar en forma de anfiteatro de colores, paramos en Luarca, a menos de una hora en coche de Oviedo. Luarca es un pequeño pueblo pesquero famoso por su sidra. Imprescindible sentaros en las sidrerías del puerto a contemplar la belleza y la calma de este enclave asturiano.