El centro histórico de Santiago de Compostela es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO desde 1985. Alrededor de la catedral compostelana gira un laberinto de callejuelas empedradas y pequeñas plazas llenas de tiendas de souvenirs, bares, restaurantes y edificios de gran interés. Turistas, lugareños y peregrinos pasean cada día por este entramado de enorme belleza.
Una de las plazas más emblemáticas de la ciudad es la Plaza de la Inmaculada, también conocida como de la Azabachería por el gremio de azabacheros que en ella se encontraban. Es fácil de encontrar ya que a ella da una de las fachadas de la catedral y, sobre todo, el Monasterio de San Martín Pinario, uno de esos edificios que, si estuviera más alejado del templo catedralicio, resaltaría muchísimo más.
Seguro que si tenéis reservados vuestros vuelos baratos a Santiago de Compostela pasaréis por esta plaza. La fachada de la catedral que da a esta plaza, que albergaba la Puerta del Paraíso, entrada principal de los peregrinos, es de estilo barroco-neoclásico, realizada tras sucesivas restauraciones en el siglo XVIII, y está coronada con una estatua del propio Santiago apóstol, colocada también allí en el mismo siglo. La estatua que se halla en el cuerpo central representa a la Fe.