Apenas ocho kilómetros al norte de Andorra la Vella teníamos nosotros nuestro lugar de alojamiento. En un principio nos pareció un poco alejado, pero cuando llegamos a él sentimos que aquel lugar difícilmente se nos olvidaría. A una altura de 1.300 metros sobre el nivel del mar se encuentra el maravilloso pueblo de Ordino.
Particularmente es uno de los pueblos que más me gustan de la zona. Típico destino de montaña, donde en invierno hace mucho frío y los turistas vienen para hacer esquí, pero que en primavera y verano es una explosión de colores. Pasear por sus callejuelas y sentarse a comer en sus tabernas es otro de sus privilegios.
Las montañas y el telón de fondo de Ordino no tienen desperdicio. Merece la pena venir en épocas más tranquilas para hacer un poco de senderismo y disfrutar del aire puro y la naturaleza. Ordino se halla a los pies del Pico Casamanya, por lo que al subirlo se van teniendo unas vistas maravillosas.
Pero, a pesar de ser pequeño, Ordino es uno de los pueblos más importantes del principado de Andorra. No en vano muestra una serie de casas nobiliarias de interés, y en especial su preciosa iglesia románica, en la que destaca su campanario, el edificio del ayuntamiento y las ruinas del Castillo de la Meca.
La iglesia románica es la de San Martí de la Cortinada, construida en origen en el siglo XIII, aunque fue varias veces restaurada en los siglos XVII y XVIII. Lo mejor tal vez está en su interior, con las pinturas murales de finales del siglo XII y su mobiliario de madera del XVII.
Pero en Ordino, además de senderismo, descenso de barrancos, esquí, rutas en bicicleta y disfrutar de la fotografía y la naturaleza, también se pueden hacer visitas culturales. Por ejemplo, al Museo Postal, al Museo de la Miniatura y a un curioso Museo Iconográfico, compuesto por una serie de iconos cristiano-ortodoxos de los siglos XVI al XIX.
Y para asistir al verdadero espectáculo de la naturaleza nada mejor que perdernos en el Bosque de Segudet, situado en el pueblo del mismo nombre, uno de los lugares más idílicos de Andorra. Aquí se pueden practicar muchas actividades, como rutas en bicicleta, senderismo, puentes de cuerda, tirolinas, lianas…
Como véis Ordino es un destino para ir en cualquier época del año. En invierno es la temporada alta, cuando todo el mundo viene hasta aquí para practicar esquí. Aún así ya sabéis que no hace falta la nieve para disfrutar en Andorra.
Foto Vía Café y Tren
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