Artá, vacaciones en Mallorca

Cala Torta

Sin duda uno de los mejores recuerdos que guardo de mis vacaciones en la isla de Mallorca es del pueblo de Artá. La belleza de la costa, en muchos de sus tramos totalmente virgen, que tiene esta zona se mezcla con la historia y los edificios antiguos que veréis en ella.

En Artá podéis encontrar de todo. A mí me encanta hacer algo de turismo por la zona, descubriendo algunos rincones ocultos, y luego descansar. Podéis, por ejemplo, tomar el camino que lleva de Artá a Capdepera para poder ver los restos talayóticos de Ses Paises, constatación más que manifiesta de que aquí ya hubo presencia humana hace miles de años.

Algo de más historia encontraréis en el Museo Regional que se halla en la Playa del Ayuntamiento de Artá. Lo más interesante de este museo son sus pequeñas figuritas de guerreros de bronce que datan de los siglos V al II a.C.

El pueblo de Artá se ubica a los pies de un monte, que tiene en su cima el Castillo de Sant Salvador, que data del siglo XIII. Dentro de esta fortaleza se encuentra el Santuario de la Virgen de Sant Salvador. Ya por estas fechas el rey Jaume II utilizó la zona como lugar de caza, repoblándola con jabalíes, ciervos, cabras y faisanes. Si véis alguno, seguro que son descendientes de aquellos del siglo XIV.

Callejeamos por Artá para llegar al Ca Na Batlesa, en la calle Ciutat. Se trata de un centro cultural en el que veréis el centro de documentación del pintor mallorquín Miquel Barceló. Si seguís callejeando por Artá veréis otros edificios señoriales, como por ejemplo la Casa del Marqués.

No, nos olvidamos de las playas de Artá. Hay muchas y muy buenas, como la Cala Torta, considerada una de las playas vírgenes más hermosas de Mallorca, y que se encuentra situada en la carretera de Artá a Capdepera. Cerca de Cala Torta tenéis Cala Mitjana, y desde esta podéis llegar a Cala Estreta.

Toda esta zona está llena de pequeñas calas que os harán disfrutar, como Cala Matzoc, Sa Font Celada, S’Arenalet d’Albarca, Na Clara o Sa Canova. No suelen ser muy grandes, casi todas de menos de 150 metros de longitud, ideales para disfrutar tumbados al sol.

Es un delito turístico viajar a Mallorca y no acercaros a Artá, uno de los mejores destinos para pasar las vacaciones en la isla.

Foto Vía Mauroldg

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