Tamborrada de San Sebastián

Cada año, el 20 de enero en San Sebastián celebran su dia grande. En este día, la tradición manda que las calles de la ciudad se inunden de tamborradas recorriendola de arriba abajo durante 24 horas.

Las tamborradas de San Sebastián están formadas por personas que tocan los tambores y los barriles acompañados de una txaranga que toca las canciones compuestas por Sarriegui, cómo la marcha de San Sebastián. La tradición dice que todos los 20 de enro a las 00:00 la tamborrada de Gaztelubide es la encargada de dar por iniciado el diá festivo. A esta hora, Gaztelubide comienza a tocar la marcha de San Sebastián y los tambores no pararán hasta 24 horas después, cuando la tamborrada de la Unión Artesana de por finalizado el día.

Además de estas 2 tamborradas, hay decenas de tamborradas que durante todo el día de San Sebastián pasean por las calles tocando los tamboresy barriles sin parar. Es un día en el que el ruido en la ciudad es constante y circular por las calles con el coche se hace casi imposible debido a que te encuentras una tamborrada cada minuto.

Así mismo, a las 12:00 del mediodía, tiene lugar la tamborrada infantil, una tamborrada compuesta por los alumnos de todos los colegios de la ciudad. Más de 5000 niños van por las calles de San Sebastián saliendo desde el ayuntamiento y haciendo sonar sus tambores durante más de 3 horas. Sin duda es un expectáculo digno de ver recomendado en cualquier guía de San Sebastián que se precie, eso si, hay que estar preparado para pasar 24 horas seguidas escuchando tambores sin parar.

 

Lérida y la atalaya de la Seu Vella

Lerida

Allá arriba vigila nuestra llegada a Lérida, a pesar de la niebla, la vieja Seo. Y decimos a pesar de la niebla porque no hubo un día en nuestro viaje por estas tierras en las que no nos acompañara ese manto blancuzco que, como en esta ocasión, embellece las cosas.

Lérida es una escapada perfecta para cualquier época del año. En verano tal vez el sol no nos deje respirar con frecuencia, pero en invierno es un enclave perfecto, aunque el frío hace acto de presencia repetidamente. Nosotros íbamos de paso, ya que nuestra intención era hacer esquí Andorra, pero Lérida ayudó a que la estancia y la ruta fuera mucho más agradable.

Ya que hablábamos de la atalaya de la Seo hay que decir que esta vieja catedral es el símbolo de la ciudad leridana. Posiblemente estemos ante una de las iglesias más hermosas de Cataluña, algo que ya de por sí dice mucho. Construida en el siglo XIII, se asienta sobre la parte más alta de Lérida y, curiosamente, aparece precedida por el claustro, realizado a principios del siglo XIV.