Visita a las dos catedrales de Salamanca

Catedrales de Salamanca

Es tal la belleza de Salamanca que uno cuando pasea por ella no puede por menos que repetir cuán cierto es su condición de Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. La Plaza Mayor, la Universidad, la Casa de las Conchas… lugares emblemáticos que, en su búsqueda del río Tormes, observan desde hace siglos a las dos catedrales de la ciudad.

Sí, dos catedrales. O eso es lo que se podría decir al ver el conjunto que forman la Catedral Nueva y la Catedral Vieja de la ciudad. Dos edificios que están conectados entre sí, aunque por su aspecto exterior apreciamos que son bien diferentes. Para su visita os recomendaría reservar vuestros hoteles en el centro de la ciudad, así podéis admirar la belleza del conjunto incluso de noche, desde el Puente Romano.

La Catedral Nueva se construyó entre los siglos XVI y XVIII. Precisamente sus elementos más llamativos, la torre y el cimborrio, son de esta última época. Os aconsejo situaros un poco alejados del templo para admirar la belleza de su cúpula, que se levanta a 80 metros del suelo. Ya en el interior os daréis cuenta de la grandiosidad de su iglesia, formada por tres naves y varias capillas laterales. No iros sin visitar el coro, uno de los mejores de España, la Capilla Dorada y la Capilla del Cristo de las Batallas.

Gastronomía en Menorca, platos típicos

Caldereta de langosta

Menorca es un paraíso de playas y pequeñas calas, un enclave que abre sus puertas en cualquier época del año para todo tipo de turismo. Porque la isla no solo es atractiva durante el verano. Su carácter rural y su patrimonio arqueológico la convierten en un destino excelente. Pero, ¿y su gastronomía?.

Pues de ella podemos decir que en Menorca se come estupendamente. Carnes, pescados, platos tradiciones, dulces, repostería… Unas vacaciones Menorca no estarían completas sin probar algunas de sus singulares delicatessen. Nosotros os hacemos un pequeño recorrido por algunos de sus principales destinos turísticos, y lo que podéis comer allí.

Empezamos por la exquisita repostería de Alaior, población que también se enorgullece de buenos licores, quesos y embutidos. Aún así, el plato que no falta en sus restaurantes es la perdius amb col, un magnífico guido de perdices con col. También hay que destacar sus sopas calientes, especialmente en invierno, cuando el frío hace mella en su carácter serrano.