El Hospital de los Venerables en Sevilla

Posiblemente si este edificio estuviera en otro rincón de Sevilla sería mucho más llamativo. Pero tal vez el hecho de encontrarse en el corazón del Barrio de Santa Cruz, concretamente en la Plaza de los Venerables, hace que no le demos la enorme importancia arquitectónica que se merece. Sin embargo, gracias también a estar emplazado aquí, no para de recibir la visita de turistas y lugareños.

El Hospital de los Venerables fue construido en el siglo XVII, y su cometido (como su nombre completo indica) fue el de dar residencia a los sacerdotes ancianos y ya retirados de la labor eclesial. Fundado en 1675 por el canónigo de la Catedral de Sevilla, Justino de Neve, hoy en día alberga la sede del Centro Velázquez, que dispone de una colección de doce obras de arte del célebre pintor.

Dicen los expertos que este edificio es uno de los más interesantes dentro de la arquitectura barroca sevillana, lo que implica que si pasamos unas vacaciones en la capital hispalense resulta de visita imprescindible. El interior corre en torno a un típico patio sevillano de planta cuadrada y una galería de arcos sustentados sobre columnas de mármol. Posiblemente sea el rincón de mayor belleza del hospital, (no en vano es el mejor patio de Sevilla) y aquel que se ha conservado tal cual era en su origen.

Xátiva, patrimonio al sur de Valencia

Después de atravesar el Parque Natural de la Albufera de Valencia me dirigí a Xátiva. Esta ciudad está situada a unos 65 kilómetros al sur de Valencia capital. Me llevé una gran sorpresa al visitarla, ya que no esperaba encontrar un patrimonio tan interesante. La vieja Saetabis romana, reconquistada a los musulmanes a mediados del siglo XIII por Jaime I de Aragón, tiene mucho que ofreceros.

Curiosamente en ella se instaló, durante la época de dominación árabe, la primera fábrica de papel de Europa. Si paseamos por Xátiva el edificio más importante que nos encontraremos será la Seu, la colegiata – basílica que comenzó a construirse a finales del siglo XVI. Destacan en ella su torre campanario, y en su interior el altar mayor, el altar del Nazareno y el museo, de visita obligada, con una colección más que interesante de retablos medievales y orfebrería religiosa.

Hay otros edificios que comparten protagonismo con la Seu, pero ninguno de tan alto valor como el Hospital Real, especialmente por su rica fachada. Construido entre los siglos XV y XVI, esta portada presenta una interesante mezcla de estilos, comprobándose la presencia del gótico, el plateresco y el renacentista. Si tenéis la oportunidad de visitar el interior, acercaros hasta la Capilla de la Asunción.

La Plaza Mayor de Trujillo en Cáceres

Trujillo, en la provincia de Cáceres, es una pequeña ciudad enjaezada de palacios y casonas nobiliarias. Cuando uno se aventura por estas tierras no llega a imaginar su enorme patrimonio. Pero claro, si atendemos a su historia, aquella que nos recuerda a numerosos trujillanos que, durante la época de las expediciones, se enriquecieron con el oro americano, se nos aclara un poco el hecho de ver a tan magníficos edificios por aquí reunidos.

Uno de los rincones más emblemáticos de Trujillo es su Plaza Mayor. Comenzó a diseñarse en el siglo XV y es, posiblemente, una de las plazas renacentistas españolas más interesantes en cuanto a su conjunto patrimonial. De ahí que si reserváis vuestros hoteles baratos en esta ciudad, y en cualquier punto de la provincia de Cáceres, este rincón trujillano es de visita imprescindible.

¿Qué es lo hace a esta plaza tan monumental, entonces? En primer lugar aparece dominada por la estatua ecuestre de Francisco Pizarro, uno de los hijos ilustres de Trujillo. La estatua, construida en bronce por Charles Rumsey, es tal vez de lo más moderno de la plaza, ya que fue colocada allí en 1929.