Se te queda grabada para siempre la imagen de Alhama de Granada, casi colgada del tajo profundo que se halla sobre el río Marchán. Situada a unos sesenta kilómetros al oeste de Granada, dicen que fue uno de esos refugios musulmanes de gran importancia estratégica. Y, vista su orografía, no nos extraña en absoluto.
Si tenéis reservados vuestros billetes de avión hasta la capital granadina os recomiendo la visita a esta ciudad. Precisamente su nombre de Alhama ya nos rememora su pasado musulmán, ya que significa «el baño» por sus famosos baños árabes y su balneario, ya descubierto en el siglo I por los romanos. Son estos baños árabes los causantes de que en Alhama siempre haya habido bastante turismo.
Sin embargo, nosotros aprovechamos para darnos una pequeña vuelta por su centro histórico, donde destacan varios monumentos. Entre ellos hay que citar la Iglesia de la Inmaculada, construida en el siglo XVII, la Iglesia del Carmen, un poco más antigua y de estilo renacentista y barroco, además del castillo, de origen musulmán, pero cuyo aspecto actual prácticamente data en su totalidad del siglo XX.