Visita el Puente Nuevo de Ronda

Cuando alguien dice Ronda, casi todos nos imaginamos la silueta del Puente Nuevo, el enorme tajo que divide la ciudad en dos partes. Con sus 98 metros de altura, este puente tardó en construirse unos cuarenta años. Pero, no sólo nos tenemos que quedar con las vistas que se tienen desde él, sino que os recomiendo visitar también el interior, un centro de interpretación para conocer su historia.

Desde el siglo XVIII es tal vez uno de los miradores más famosos de España. Ronda es una magnífica excursión que podéis hacer desde Málaga. Si reserváis vuestros vuelos a la ciudad malagueña, a unos cien kilómetros al oeste se halla la ciudad rondeña.

Este Puente Nuevo, también conocido como Tajo de Ronda, está dividido en tres partes. La de abajo, un arco de medio punto sobre el río Guadalevín, la zona del medio, la más grande de todas, y la parte de arriba, donde se halla el centro de interpretación y que, antiguamente, era una prisión.

Torre de Capdella, turismo rural en los Pirineos

Cuando llega el invierno, una dulce alfombra blanca se extiende sobre el rostro de la Torre de Capdella. No me extraña que, viéndolo, muchos digan que estamos ante uno de los pueblos más bonitos del Pirineo leridano.

Hace frío en estas fechas, pero eso poco importa. De lejos se oye el tintineo de las aguas del río Flamisell. Este pueblo se halla a poco más de 1.000 metros de altitud, y desde aquí se pueden hacer excursiones por la zona, como al Parque Nacional de Aigüestortes y Estany de Sant Maurici, o incluso para hacer esquí en Baqueira.

Las casas de Torre de Capdella parecen ir subiendo poco a poco el cerro en el que se hallan enclavadas. De los tejados sobresale la silueta de la Ermita de San Martí, templo de estilo románico de enorme sencillez y belleza, y que fue declarado en el 2007 Bien Cultural de Interés Nacional.