Después de un gran día de turismo, haciendo excursiones de todo tipo y visitando museos, monumentos y todo tipo de atracciones, a muchos lo único que les apetece es descansar en el hotel. Otros, como es mi caso, prefieren pasear un poco por la ciudad, en plan tranquilo, sin más interés que el disfrutar del ambiente.
Podéis cernar en alguno de los restaurantes Madrid y después dar un pequeño paseo relajante. Hay tantas posibilidades para pasear tranquilamente en Madrid, sobre todo en lugares fuera del bullicio y el tráfico intenso de la ciudad. Os recomiendo algunos de los rincones por los que me gusta pasear en Madrid.
Un poco más allá del Paseo del Prado tenéis la Plaza de la Lealtad. En esta plaza, entre frondosos árboles se encuentra el Obelisco a los Héroes del Dos de Mayo, con las cenizas de aquellos que murieron en el levantamiento contra las tropas de Napoleón en 1808. Sus cuatro estatuas representan a la constancia, la virtud, el valor y el patriotismo.