Hoy nos encontramos sentados en la Plaza Mayor de Salamanca que, a pesar del frío, se puede estar aprovechando el sol, y tomando una copa de vino. Brilla la plaza al contacto del sol, y es posiblemente la plaza más bonita de España. Por lo menos, a mí me lo parece. Sin embargo, esta plaza es sólo uno más de los encantos que una ciudad como Salamanca tiene que ofrecernos.
Hemos aprovechado uno de los muchos vuelos baratos que hay a Salamanca, y nos hemos acercado a esta ciudad, Capital Europea de la Cultura en el 2002. A pesar de todo, la cultura no se fue de la capital charra desde entonces, todo lo contario.
La Catedral de Salamanca, bella señora gótica, domina todo el centro histórico de la ciudad. Para los salmantinos realmente es una catedral nueva… Bueno, data del siglo XVI, pero es que hay una catedral vieja que se sitúa junto a ella, y esta data ya del siglo XII. La catedral nueva es una visita imprescindible en la ciudad, sobre todo para los turistas curiosos que buscan el astronauta que hace unos años se esculpió entre sus piedras.